Y sobretodo ¿qué ocurre en casa que haga que el niño no quiera ir a su casa sinó quedarse en el colegio -si lo entiendo bien -?

Si el problema no es en la escuela, sinó en casa, debieras revisar qué problema él puede percibir en casa (que igual no es ningún problema, solo algo que le hace sentir mal). Igual la cosa es tan simple como que en la escuela hay niños con quienes jugar y en casa no.

Yo siempre he visto el caso contrario: niños que lloran y se enojan cuando se les deja en la escuela.

Por si te aporta algo te cuento el inicio en el cole de mi hija:

Cuando mi hija empezó el cole durante el periodo de adaptación estuvo rara, se notaba que algo había. El primer día cuando les tocó entrar a los de su turno me tiró de la mano para entrar la primera y estaba super contenta. Es una niña que en  general le gusta ir al cole, lo único que no le gusta es madrugar. Pero esa semana fue un poco caótica para ella (dejarla por la mañana con los abuelos, para que luego le llevaran a media mañana al cole, que el primer día me escapara yo del trabajo para estar con ella el rato de entrar, pero no el resto de los días... yo creo que todo eso hacía que estuviera algo descolocada) y la llevó regular.
Luego ya con el ritmo normal cogió su rutina y se pasó esa fase de estar algo rara.

Imagino que la situación de tu hijo es diferente. Pero te lo cuento para que veas que puede haber cositas que hagan que nuestros hijos estén alterados, pero que no significa que vayan  a tener un trauma ni nada parecido.

Por ahora, pues armarse de paciencia. Sobretodo, no reprenderle su comportamiento y tratar de validar sus sentimientos. Se me ocurre que igual puedes hacer comentar, así como quien no quiere la cosa, que hoy no tenías ningunas ganas de ir al trabajo y que hubieras preferido hacer tal cosa con él... como para que vaya entendiendo que a veces hay cosas que debemos hacer, aunque de entrada no nos apetezcan. Y luego, cuando esté en casa, pues jugar mucho con él para "compensarle".

Ánimo!

El mío también pasó por un proceso de adaptación complicadete, de hecho estaba más días en casa que en el cole. Poco a poco, se van adaptando. 

Pero por x motivos viví con ella todo un verano, a más de 100km de mi familia, cuando tenía dos años, y un año entero cuando tenía 6, más 3 o 4 veranos posteriores. Y le cogí manía.

De adulta un dia, ni se como, me di cuenta que como "no podía" enfadarme con mis padres, la hacía a ella responsable de mi enfado/tristeza por estar lejos de casa. Ese dia hice las paces (mentales) con ella, y ya era lo suficientemente mayor para comprender y no culpabilizar a mis padres del porque me "mandaban" lejos de casa.

Quizás a tu hijo le puede pasar algo parecido, está bien en la escuela, pero, evidentemente, preferiría estar contigo y de alguna manera se siente apartado, y tiene un enfado dentro que ni él mismo sabe que tiene.

Si ese es el caso, y si no también jeje, acompáñalo en el proceso, demuéstrale cuanto le quieres no importa lo que haga (que no quiere decir no corregirlo, sinó separar el hecho de la persona en si, no es malo sinó que ha hecho algo no adecuado) y poco a poco todo volverá a su cauce. 

Hubo un tiempo que mi madre tenía que viajar bastante por trabajo. No eran viajes largos, a lo sumo cinco días, y yo la echaba mucho de menos. Cuando llamaba por teléfono, siempre le preguntaba si quedaba mucho para que volviera, pero cuando llegaba, no quería ni darle un beso, ni la miraba, y si me traía algún regalo, tardaba lo menos un día en aceptarlo. Aunque tenía muchísimas ganas de verla y de que volviera, era mi forma de manifestarle mi enfado por haberse ido.

Pero por eso no se afectó la relación que luego he tenido y tengo con ella. Con el tiempo aprendí a aceptarlo y a entender la situación.

En tu caso, tu hijo manifiesta así su enfado por la separación. Lo mejor que haces es respetar su estado de ánimo y en esos momentos dejarle que lo exprese y tratarlo con normalidad. Cuando esté receptivo, puedes hablar con él y mostrarle que entiendes su malestar.

Los míos también lo hacían!!

Pero no creo que "compensarlo" después sea bueno, porque sería decir que lo que ha pasado (ir a la escuela) es malo, y la escuela no tiene que percibirla como una cosa mala.

Y también puede alargar esta reacción, porque verá que si demuestra enfado o malestar, tu vas a compensarlo.

Yo voy a explicar mi postura con respecto a esto. 

Pueden percibir la escuela como la sientan ellos. Otra cosa es que refuerces eso o lo agrandes, o lo manipules, pero claro que pueden sentir que no quieren estar ahí y que preferirían estar en otro sitio. Creo que no hay que hacer luz de gas a los sentimientos de los niños, simplemente dejarlos estar. No hay que romantizar tampoco la escuela, ni lo maravilloso que es estar con otros 19 niños en un aula de infantil, porque seguramente sea verdad que estaría más cómodo en casa y tan feliz. 

Mis hijos los dos van contentos al cole, pero si les preguntas vienen estresados del ruido/los gritos/estar sentados todo el rato. Prefieren mil veces vacaciones y casa. Yo no les convenzo de que el cole mola, van ellos sacando sus conclusiones y yo escucho. 

La escuela no es mala, pero un niño se puede sentir algunos días mal, algunos ratos mal y eso hay que aceptarlo como válido.  No hay que convencer de lo contrario: de cómo se siente. 

Si no se hace de un modo artificial la compensación, sino desde el sentir de que realmente quieres disfrutar del tiempo con tu hijo, yo discrepo en que eso se alargue. Mi hijo ha sido -y sigue siendo un poco- de descargar sus frustraciones en mí, porque le desbordan mucho las emociones. Me ha costado mucho tiempo y esfuerzo llegar a entender como funcionaba esa manera de comunicarse conmigo, y lo que más me ha ayudado es ver que cuando estaba desbordado, era como una manera de hacerme sentir a mí las dimensiones de esa rabia/dolor/ frustración que él sentía. Y esa perspectiva es la que más me ha ayudado a ayudarle. Nunca pensando en reforzar/extinguir, sino entender y desde ahí ir avanzando. Por dar otra perspectiva. 

Exactamente. 

Muchas veces sólo queremos -no el caso de la forera- eliminar lo que nos molesta o nos incomoda, pero lo importante es que estemos abiertos a que no le guste el cole, o no le guste como nosotros queremos, o no se ajuste al discurso oficial de que el cole es bueno, en el cole estás muy bien. Simplemente dar ese espacio para lo que sienten.  A mi en el caso de mi hijo me preocupa mucho más cuando embotella, que cuando llora o se enfada. Porque cuando embotella encima siente que no son legítimas son preocupaciones/frustraciones, o que no conviene expresarlas por lo que vamos a opinar de sus angustias.